El proyecto del Parque del Acueducto en Ciutat Meridiana, Barcelona, no es solo un parque; es el resultado de la colaboración activa entre los habitantes del barrio y los arquitectos, quienes trabajaron para construir un espacio que reflejara las necesidades y los deseos de la comunidad. En un barrio con una gran diversidad cultural y una historia de limitadas áreas recreativas, este proyecto representa un cambio significativo y una oportunidad para conectar con la naturaleza y el patrimonio local.
Este parque nació de una iniciativa comunitaria enmarcada en el “Pla de Barris”, una consulta que invitó a los vecinos a expresar sus ideas sobre cómo mejorar el entorno en Ciutat Meridiana. En estas encuestas, una de las demandas más comunes fue la creación de un parque accesible y adaptado a todos los públicos, un espacio que fomentara la integración y ofreciera alternativas de ocio tanto para niños como para adultos.
El lugar donde ahora hay el parque solía ser un campo de fútbol, el único espacio relativamente amplio donde los residentes podían moverse libremente. Sin embargo, este espacio no ofrecía suficientes opciones para el ocio de los más pequeños ni para el disfrute de la comunidad en su conjunto.
El elemento central del diseño es el antiguo acueducto que se encuentra al fondo, un patrimonio arquitectónico que ahora se integra en el entorno verde del parque. Esta conexión visual y física entre el parque, el acueducto y la naturaleza que rodea a Collserola convierte el área en un paisaje único y valioso para la comunidad.
Antes, los niños de Ciutat Meridiana solo tenían acceso a áreas para jugar fútbol o baloncesto y ahora pueden jugar, imaginar y desarrollar sus habilidades físicas y creativas en contacto con la naturaleza. También ofrece áreas de ejercicio al aire libre para los adultos, quienes pueden caminar o utilizar los aparatos de ejercicio instalados. Esto permite que personas de todas las edades puedan disfrutar de un espacio que promueve la salud física y el bienestar mental.
El diseño del parque fomenta también la interacción entre comunidades. Personas de distintas culturas, edades y procedencias encuentran en este parque un lugar de integración y respeto mutuo, un verdadero espacio de convivencia para todos los vecinos de Ciutat Meridiana. Un proyecto que da valor al espacio público, fortaleciendo los lazos comunitarios y celebrando la diversidad y el entorno natural.
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