La sostenibilidad es un reto global que afrontan todo tipo de empresas y sectores. En BDU creemos que es nuestra responsabilidad cuidar del medio ambiente para asegurar buenas condiciones de vida para futuras generaciones. Por este motivo, apostamos por crear parques infantiles exteriores sostenibles como el de Calonge, un caso de éxito ecológico.
Cómo conseguir crear parques infantiles exteriores más sostenibles
Garantizar un contexto ecológico es esencial para los más pequeños. Construir un parque infantil respetuoso con el medio ambiente es el primer paso hacia la sostenibilidad y puede tener un impacto positivo en el entorno. Además, permite enseñar a los niños valores y principios de respeto hacia la naturaleza.
A continuación, destacamos algunos aspectos que contribuyen a crear parques infantiles exteriores más ecológicos.
Un entorno natural
Los parques infantiles en la naturaleza se basan en el concepto de que los niños se benefician de encontrarse en un entorno natural y de relacionarse con este. Así, los pequeños tendrán una mejor salud física y mental y desarrollarán una mayor creatividad. En estos espacios se incluyen elementos de juego creados con materiales naturales como la arena, el agua y la madera, cuya producción es respetuosa con el medio ambiente.
Materiales de origen responsable
Es fundamental abastecerse de materiales respetuosos con el medio ambiente. Nuestra madera consiste mayoritariamente en alerce de montaña de los Alpes. Crece entre 1000 y 1800m de altura, procede de silvicultura sostenible y cuenta con Certificación PEFC. Nuestro proveedor de madera está certificado según EN 45011 PEFC, así como los procesos de producción. Este certificado confirma que la madera aserrada de coníferas procesada y tratada, y los troncos de madera proceden de silvicultura sostenible.
Materiales reciclables
El parque infantil puede estar construido con materiales reciclados y reciclables. Asimismo, los equipos de juego deben estar construidos de tal manera que, cuando llegue el momento de su eliminación, puedan desmontarse en partes y reciclarse. Los juegos infantiles industriales más antiguos o baratos que carezcan de estas características acabarán en un vertedero.
Mantenimiento regular
Hay que preservar los recursos en el parque infantil. Para evitar gastos en reparaciones y sustituciones, es necesario un mantenimiento regular. Esto no solo mantendrá la seguridad, la funcionalidad y la belleza del parque, sino que también alargará su vida útil y, por tanto, la felicidad de los niños que lo disfruten.
El parque de Calonge, concebido como un proyecto sostenible
El proyecto de Calonge ha cambiado de forma extraordinaria la actividad de la zona. Este espacio verde, cedido de una urbanización, era un lugar vacío y sin vida que ahora se llena de gritos y alegría todos los fines de semana.
El actual parque cuenta con una pirámide con dos accesos para todo tipo de edades, un arenero junto a la sombra de un árbol-banco que acoge a los padres y madres, un caterpillar para los más pequeños con variedad de elementos para jugar con arena, una fuente con canales para jugar, refrescarse y aprender como fluye el agua y un esqueleto de madera natural que invita a trepar y hacer equilibrios.
El proyecto se planteó de forma que se aprovecharan todos los recursos de la zona. La propuesta de sostenibilidad y ecología consistía en reaprovechar la tierra extraída en las obras, de modo que el movimiento de tierras para hacer los taludes se hizo sin desechar tierra de la excavación. Ahora, los montículos de tierra están redistribuidos en el parque de modo que forman parte del juego y hacen de éste espacio un lugar agradable con desniveles como los de la propia naturaleza.
Si desea más información sobre la sostenibilidad en parques infantiles exteriores, no dude en ponerse en contacto con nosotros.
Desde BDU trabajamos estrechamente con nuestros clientes para integrar juego y bienestar en el entorno.
BDU diseña, distribuye y crea espacios de ocio, teniendo en cuenta el desarrollo positivo a través de la interacción con el entorno natural.