Al diseñar un parque infantil hay que tener en cuenta muchas variables para asegurar un espacio con oportunidades de juego y de aprendizaje óptimas. Como adultos, puede resultar difícil asumir la perspectiva infantil y diseñar pensando exclusivamente en las necesidades de un niño. Por este motivo, en este artículo hablaremos de los principios más importantes que hay que tener en cuenta en el momento de crear el diseño de los parques infantiles.
Consejos y trucos para el diseño de parques infantiles
¿Cómo crear el diseño de un parque infantil exitoso? Desde BDU hemos seleccionado las cinco recomendaciones que Peter Heuken, director de proyectos especiales de Richter, ofreció en una de sus presentaciones en 2018.
1. El sueño del diseñador
En demasiadas ocasiones podemos encontrar espacios de ocio infantil encajados entre cuatro vallas, con un entorno poco aprovechado y unos elementos de juego agolpados sin un sentido claro. Al hablar del “sueño del diseñador”, Heuken pretende animar a estos profesionales a soñar, sí, pero considerando aspectos como el entorno, la naturaleza y el 3D para el agua, los toboganes y la experiencia de la altura en los parques.
Este principio se refiere a aprovechar correctamente el entorno del parque para ofrecer un espacio más natural y con un mobiliario que permita muchas oportunidades de juego y aprendizaje para los pequeños.
2. Visión general y detalles
En este principio cobra especial importancia la perspectiva del niño. En este sentido, Heuken defiende espacios “grandes” pero adaptados a las necesidades infantiles: “uno entiende la perspectiva del niño solo de rodillas”. No hay que construir monumentos para uno mismo. Además, cuanto más joven es el niño, mayor es la necesidad de detalles.
3. El valor del juego antes que la seguridad
Ya hemos hablado de la gestión del riesgo anteriormente. Según Heuken, la seguridad en los parques infantiles es como los frenos del coche: tienen que funcionar, pero no son el propósito del coche. La seguridad en los parques infantiles depende en un 10% de las condiciones técnicas, pero en un 90% del comportamiento. Por ello, el ambiente y una buena planificación son las claves para un entorno de juego seguro, pero con un riesgo adecuado a la edad.
4. El destino frente al parque infantil del barrio
Los parques infantiles para excursiones de un día y los de barrio funcionan de forma diferente. Mantener este factor presente ayudará clarificar cómo queremos que sea nuestro parque. En el caso de los parques de barrio, los juegos de rol funcionan muy bien para fomentar la interacción social entre los niños, mantenerlos ocupados, con interés y formando vínculos de comunidad.
Para los parques de excursiones, las dinámicas cambian. En este caso, deben atenerse a reglas distintas: para todas las edades, mantenimiento intenso que resista las multitudes, que sea singular y que dé que hablar. Los parques infantiles de destino se convierten en referencias para los planificadores por el reto que suponen.
5. Sentido común
Günter Beltzig, diseñador de Richter afirma sobre la accesibilidad que “los obstáculos y las dificultades no deben eliminarse, sino que deben planificarse de forma que puedan superarse para permitir nuevas experiencias”. De este modo, la inclusión es el objetivo, pero la accesibilidad un aspecto técnico.
Además, los niños (y los planificadores) deben aprender que el juego no termina a los 12 años, sino que es normal que los padres y los abuelos también jueguen. Hay que tener este aspecto en cuenta para crear los diseños de parques infantiles.
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Desde BDU trabajamos estrechamente con nuestros clientes para integrar juego y bienestar en el entorno.
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