La idea central de Queralt Suau ha sido integrar la zona de juego en la plaza. Antes, el área de juego estaba delimitada por una pequeña valla, creando una barrera entre el juego y el resto del espacio. La nueva propuesta ha logrado fusionar el juego con la plaza, convirtiéndolos en un solo espacio cohesivo, dinámico y completamente abierto.
Los elementos lúdicos han sido diseñados específicamente para este proyecto teniendo en cuenta las diversas experiencias que los niños pueden vivir. Los juegos invitan a la interacción, desde un espacio donde sentarse, observar y conectar, hasta oportunidades para deslizarse, saltar, columpiarse, correr y escalar. Además, se han incorporado diferentes texturas para fomentar un desarrollo sensorial completo.
Al observar el “antes y después”, queda claro que se ha logrado algo especial. Con la idea y el diseño de Queral Suau, se ha dado una vida vibrante a la Plaça Revolució. Ahora, la plaza invita a la gente a interactuar de forma natural, convirtiéndose en un verdadero punto de encuentro.
